Cómo adaptar la casa a personas mayores y aumentar su comodidad
Según pasan los años y se va perdiendo la movilidad, es necesario realizar cambios en el hogar para hacerlo más cómodo y funcional, manteniendo en la medida de lo posible su estructura original.
Adaptar la casa a una persona mayor puede evitar muchos sustos y problemas de dependencia, y las distintas comunidades autónomas y/o ayuntamientos proporcionan ayudas a la reforma de la vivienda de personas mayores.
Por qué es necesario adaptar una casa a personas mayores
La casa donde uno vive debe ser cómoda y segura, y, en el caso de las personas mayores, estos dos factores son especialmente importantes.
Por eso, según van apareciendo “barreras” es necesario ir adaptando la vivienda y sorteándolas para hacer la vida más agradable y tranquila a la persona mayor. En esta reforma, es importante valorar las necesidades de cada persona y cómo adaptarse a la nueva situación.
Aspectos a tener en cuenta antes de efectuar cambios en la vivienda
Cuando se plantea adaptar la vivienda de una persona mayor para hacerla más accesible, lo primero que hay que tener en cuenta es eliminar las barreras arquitectónicas, tanto del interior como del exterior. Asimismo, hay que despejar las habitaciones, conservar solo los muebles que sean imprescindibles y emplear un mobiliario adaptado para personas dependientes. También es importante eliminar alfombras para evitar tropezones y valorar la altura a la que se encuentran los objetos más utilizados para que estén al alcance y no haya que usar una escalera o banco para cogerlos.
En los casos en los que se utilicen andadores o sillas de ruedas, hay que tener suficiente espacio para poder pasar y adaptar la anchura de las puertas si fuera necesario.
Consejos para adaptar la vivienda a una persona mayor
A la hora de adaptar la vivienda a una persona mayor es importante considerar aspectos relativos a su movilidad y su capacidad funcional. Dependiendo de las necesidades, se puede contar con los elementos de apoyo, que son productos diseñados especialmente para prevenir o compensar las limitaciones que van teniendo las personas mayores para llevar a cabo sus actividades diarias, incluido el aseo personal.
Si se tiene un baño geriátrico en casa, la higiene diaria será más fácil. Entre los elementos imprescindibles que pueden ayudar a adaptarlo están los siguientes:
- Asidero Ducha 29 cm de Aposán : se puede emplear en la ducha o en el baño para que la persona mayor se apoye mientras se asea. Este dispositivo le ofrece confianza y le ayuda a mantener el equilibrio cuando sea necesario, sobre todo al entrar y salir de la ducha.
- Taburete de Ducha Ergonómico de Aposán: cuenta con dos asas en los laterales para poderlo elevar y tiene una estructura de aluminio anodizado que evita la corrosión. Lo pueden utilizar personas que pesen hasta 110 kg y tiene unas dimensiones de 45,5 cm a 48 cm de ancho, con una profundidad 36,5 cm a 38,5 cm.
- Asiento Elevador Inodoro 10 cm de Aposán : ayuda a incorporarse con facilidad al retrete, ya que cuenta con una forma anatómica moldeada para hacer más fácil la fijación al inodoro. Además, se puede limpiar con normalidad para asegurar su higiene y mantenimiento.
Qué debes tener en cuenta para adaptar cada habitación
Desde la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología ofrecen una serie de recomendaciones para adaptar las distintas habitaciones de la vivienda de una persona mayor.
- Salón. Es la habitación donde más tiempo se pasa y es importante despejarla de muebles innecesarios para facilitar la movilidad. Ya hemos comentado que las alfombras pueden ser un elemento con el que se tropiece, al igual que los cables de los diferentes electrodomésticos, que también deben estar recogidos. Los sillones o sofás deben tener una altura adecuada para que se pueda sentar y levantar con facilidad.
Si la persona mayor permanece mucho tiempo sentado, el Cojín Antiescaras Redondo* de Aposán puede ser de gran utilidad. Tiene un agujero central y está hecho con fibra hueca siliconada. Se puede utilizar tanto en un sofá o sillón, como en la silla de ruedas, ya que incluye unas cintas para poderlo fijar al asiento con facilidad. Mide 44 centímetros.
El Cojín de Prevención* de Aposán también puede ayudar a evitar la aparición de escaras en personas con movilidad reducida. Está fabricado con material viscoelástico con memoria 65 kg/m3 para prevenir las úlceras por presión. Incluye una funda negra antideslizante, ignífuga y repelente al agua, que además es transpirable. Se puede desmontar con facilidad para su limpieza y no tiene costuras. Las medidas son de 40x40 cm y soporta un peso de hasta 100 kg. - Dormitorio . El acceso a la cama debe estar despejado y contar con puntos de luz adecuados. Si hay alfombras cerca de la cama, deben estar bien sujetas o, preferiblemente, deben quitarse para evitar resbalarse al bajar de la cama.
- Baño . Si la movilidad no es muy buena, se recomienda cambiar la bañera por una ducha. Las distintas administraciones locales o autonómicas ofrecen subvenciones para adaptar los baños.
- Cocina . Se debe organizar para alcanzar sin esfuerzo los utensilios que más se utilizan. La luz también debe ser la adecuada y contar con electrodomésticos para personas mayores.
- Pasillo y entrada . Las zonas de tránsito deben estar despejadas y bien iluminadas para evitar caídas y tropezones.
Acude a tu farmacia y pregunta por los productos de Aposán. Tu farmacéutico de confianza siempre está disponible para ofrecerte consejo y recomendarte lo más adecuado, según tus necesidades.
*PRODUCTO SANITARIO. Cumple la normativa vigente de productos sanitarios.
Fuente:
- Una casa sin barreras. Sociedad Española de Geriatría y Gerontología.
- Home adaptations. National Institute of Health UK.
- Elaboración propia.